sábado, 29 de mayo de 2010


Las clases del profesor de filosofía son diferentes, ya que el temario que se imparte, no es el mismo que el temario impartido por otros profesores del mismo departamento, también hace diferente los exámenes, pues son tres en vez de uno (por tema), está el teórico, que es de tipo test, acompañado por otro examen que es un comentario, tienes que resumir lo que significa el texto y decir si es deductiva, inductiva o yuxtapuesta y, después hay otra pregunta relacionada con el tema que hemos dado. El práctico, como la palabra bien dice, es “práctico”, no importa lo mucho que hayas estudiado, lo importante en este examen es comprender bastante bien la teoría y así ponerla en práctica mediante ejemplos o hechos. Por último y no menos importante, es el examen de materiales, que aunque puedas realizar el examen mediante la ayuda de apuntes, la verdad que no nos sirve de mucho. El examen es sobre una novela que se debe de leer durante el transcurso del trimestre. Es una de las clases, o para otros la única, en donde ir no resulta aburrido, ya que aparte de aprender te estás divirtiendo. Sí, lo reconozco, en las clases de Enrique P. Mesa a parte de aprender, también me divierto. Pienso que sus clases son tan peculiares por sus experiencias vividas como profesor, ya que sabe como llamar nuestra atención, pone bastante interés para resolver nuestras dudas, pero claro de lo bueno siempre se saca algo negativo, y es que al realizar tantas cuestiones al final en los exámenes siempre entra estos ejemplos y dudas en los exámenes.Espero que al año que viene le tenga en psicología y en filosofía (aunque por lo que me han contado… filosofía es bastante duro).

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